Una entrevista
flotando en el ambiente, un inhalador de cannabis para estrenar, un romántico
empedernido que quiere volver a sentirse enamorado, una exploradora de mundos
inciertos, que inesperadamente disfruta de un intenso encuentro amoroso, mensajes
y canciones de amor que acompañan un diálogo inconexo y a veces absurdo en
medio del absurdo. Una reunión íntima en la alcoba de ella, una cama, una vela
traicionera, un coqueteo tibio en medio del living de su casa donde sus hijos y
sus amigos juegan con la puerta abierta, somos parte de un juego íntimo de una
intimidad imposible. Mezcla extraña de anhelos y consciencias alteradas,
recuerdos dolorosos que quieren emerger para sanar y para sanarse, retozos
torpes y erráticos, ojos que se cierran… una velada extraña e inolvidable que
termina. Mañana será otro día…